“Déjame Entrar”


Quiero Estar Presente En Tus Sueños, Bajo El Calor De Tus Sábanas Y Entre Tus Piernas Quedar Entrelazada, Para Así Poder Viajar Alrededor De Tu Cama, Recorriendo Uno A Uno Los Rincones Inexplorados Que La Noche Se Ha Encargado De Resguardar Bajo El Cobijo De La Luna, Entre Las Tinieblas Que Cuidan Tu Alma, Junto A Las Estrellas Que Velan Tu Sueño, En Cada Uno De Sus Destellos…

Quiero Estar Presente En El Interior De Tu Alcoba, En La Intimidad De Tu Cama, Y Así Poder Saciar Mi Sed… Mi Sed De Amor, Mi Sed De Pasión, Mi Sed De Ti… Esta Sed Que Es Provocada Por El Fuego Que Poco A Poco Consume Mi Pasión, Desbordándose Sobre Mi Cuerpo, Apoderándose De Mis Deseos, Aprovechándose De Mis Instintos, Seduciendo A Mi Moral, Convenciendo A Mi Intelecto De Que Esto Que Siento Es Normal…

Quiero Estar Presente Mientras Duermes, Y Así Poder Aprovechar Cada Espacio De Tu Cuerpo, Recorriendo Con Mi Lengua Cada Centímetro De Piel, Y Llenarte Con Mis Labios Húmedos De Miel Que Solo Quieren Saciar Tu Sed... Quiero Escuchar A Tu Boca Susurrarle Lentamente A Mi Oído “Soy Tuya” Cuando Consigues El Milagro De Poder Llegar Al Cielo Con El Suave Toque De Mis Manos Sobre Tu Lienzo, Perfecto Lienzo Que Recubre Todo Tu Cuerpo…

Quiero Sentirme Dentro De Ti, Ir Penetrando Lentamente Todo Tu Ser, Sin Haber Dejado Intacto Ni Un Cachito De Piel… Quiero Saciarte Toda Toda.! Quiero Tenerte Dentro De Mí… Quiero Sentirte Estremecer… Quiero Escuchar Mi Nombre Cada Vez Que Logres Llegar A Ese Mágico Lugar De Sensaciones Extrañas Que Viajan Por Tus Venas, Haciendo Vibrar Todo Tu Cuerpo, Enloqueciendo Tus Deseos, Acelerando Tus Latidos, Incrementando El Erotismo, Satisfaciendo Tus Instintos…


Verónica Gil Bravo

“LA DAMA Y EL MENDIGO”

El mendigo admiraba fervientemente a aquella misteriosa dama que sobre sus pieles vestía distintos colores que adornaban su tenaz figura, y que tatuados sobre aquel pintoresco lienzo, simbolizaban las distintas facetas que a lo largo de su excitante y grata existencia, enmarcaban sus diversas y emocionantes aventuras, inmortalizando sus múltiples y victoriosas batallas…

Aquella misteriosa dama tenía nombre y apellido… Tenía voz, presencia, rostro y un cuerpo erguido… Sin embargo, eso no era de interés para el mendigo, que diariamente soñaba con poder tener un lugar en la mente de aquella mujer tan hermosa, aunque solo fueran unos instantes, aunque fuera solo por accidente, aunque esto fuera solo un incidente inconsciente de aquella princesa tan decente.

Todas las noches, el mendigo invocaba al cosmos y suplicaba arrodillado, con la mano en su corazón, que algún día esa mujer tan sorprendente pudiera fijarse en él, noche tras noche entablaba un dialogo interior que abarcaba desde su mente hasta su corazón, desde su cuerpo hasta su razón, desde su cuarto hasta el exterior…

Fijamente buscaba un lucero en el cielo y cuando lograba encontrar el más grande, brilloso y bello, elevaba una oración a aquel que fuese su creador, fielmente rezaba su plegaria, aunque el mendigo no tenía fé y le costaba mucho trabajo poder creer, el día que se enamoró de aquella misteriosa dama, cambio su parecer.

Un día normal, común y corriente el mendigo salió a caminar como de costumbre, su mirada estaba fija siempre en el suelo, como si quisiera corroborar que sus pies tocaran el piso y caminaran sobre senderos conocidos.

Ese día sin querer, alzó la mirada y la vio junto a él, a aquella misteriosa dama con la que noche tras noche soñaba, a la que día tras día le lloraba, por la que noche tras noche rezaba, a la que día tras día esperaba, aquella dama que el mendigo añoraba… En un instante, sus miradas se cruzaron, sus vidas se entrelazaron, sus almas por fin se conectaron… Ese fue el mejor encuentro amoroso que el mendigo había experimentado en toda su miserable y aburrida existencia.

La atracción fue tal que a un café fueron a dar y gustosos los 2, la dama y el mendigo, empezaron a hablar y mientras esto ocurría, el café se consumía y aquel cigarrillo de poco en poco ceniza se hacía, mientras tanto, la noche cayó de pronto, el sol se ocultó hasta el fondo, dándole paso a una gran luna llena… A su alrededor, empezaron a brillar mil y una estrellas que se unieron para lograr el escenario perfecto de aquella mágica velada que sobre un conocido café de la región, empezaba a prosperar.

Sin embargo, mientras todo esto ocurría, iban pasando las horas y el reloj lentamente entre cada giro de sus manecillas, iba poniéndole fin a aquel instante tan maravilloso… Así pues, el tiempo presionó a aquella bella dama, haciéndola partir de regreso hasta su casa, concluyendo de esta manera, la hermosa velada.

El mendigo, no quería perder la oportunidad de volver a tener frente a él a la mujer más maravillosa que solo en sueños creyó conocer, y antes de que la damisela partiera hasta desaparecer, aquel temeroso mendigo solicitó volverla a ver y la citó nuevamente en lugar donde por primera vez la vio tan majestuosa, la misteriosa dama accedió sin dudarlo, para asombro del mendigo, la dama no lo pensó tanto y la invitación encantada acepto con agrado.

Feliz aquel mendigo regresó a casa, y en su mente solo existía un pensamiento recurrente y litigante que durante el resto de la noche lo mantuvo al borde de un ataque, alojándose en su cuarto, enfermándolo de insomnio, invadiéndolo de sensatas y espeluznantes sensaciones que penetraban sobre su piel, habitando su cerebro, irrumpiendo en sus ideas, apoderándose de sus latidos, alterando sus respiraciones, produciéndole algunas alucinaciones que lo llevaron a fumarse un cigarrillo a mitad de la noche, para así poder bajar su estado de completa ansiedad que le ocasionaba la espera de aquella cita que le traería de regreso a su vista a aquella diosa que disfrazada de damisela se vestía.

Al cabo de unos meses, la mente confundida de aquella misteriosa dama, le tendió una trampa a su aturdido y receloso corazón, pues creyó estar enamorada de aquel ingenuo y fiel mendigo que aguardaba por su amor, así que una tarde fría cuando el sol caía, le citó en su alcoba para expresarle el descubrimiento que había hecho apenas algunos soles atrás, finalmente, se reveló la verdad ante aquella tarde otoñal, en el onceavo mes del año 2008, a los 30 días del mes que estaba por concluir, en aquel noviembre gris que parecía llegar a su fin… Fue en ese periodo que el cosmos decidió unir a la dama y al mendigo…
CONTINUARA…

Verónica Gil Bravo

“Bajo Tus Sabanas Blancas…”


Me recordaras entre tus sabanas blancas, cuando para ti, yo posaba…
Algunas veces, temerosa, cuando el pudor de mi se apoderaba…
Con la timidez invadiendo mi ser, con mis complejos cubriendo mi piel…
Con la pasión desenfrenada quemando mi ser…
Con el deseo incontrolable que encendía mi piel…
Con el calor de mi cuerpo que se negaba a ceder…

Algunas veces con ambas manos, me aferraba a mi ropa
Queriendo tapar mi desnudez…
Tú en cambio, lentamente con las tuyas,
Ibas despojando una a una las telas que cubrían mi lujuria…

Las ropas que disfrazaban mis ganas y al mismo tiempo detenían el impulso instintivo de saltar hasta tu cama y desgarrarte la ropa,
Para así consumar nuestro amor que ardía en pasión,
Bajo las sabanas blancas que cubrían tu cama…

Aquella cama que presenciaba nuestras más bellas batallas,
Que en nombre del amor y la pasión, fueron proclamadas…
Y de pronto, estábamos así…
Enlazadas cuerpo a cuerpo y piel con piel,
Alma con alma y ser con ser…

Y aquella gran batalla campal,
Que bajo las sabanas blancas se daba,
Poco a poco se iba disolviendo
Hasta que todo volvía a estar en total calma…

Pero todo esto ya es pasado…
Ahora solo deseo que en el invierno largo y frío
Tu corazón encuentre el cobijo y que en ti viva
La llama que consuma el leño del deseo para acompañar a tu cama,
Que ahora se encontrará en total y plena calma
Tan vacía y solitaria que talvez, desearías estar acompañada…


Verónica Gil Bravo

“A Mitad De La Noche”

Hoy me encuentro a mitad de la noche
Envuelta en un mar de grandes emociones
Tratando de plasmar en una hoja de papel
Todos estos sentimientos que provocas en mi ser…

Tú despiertas mis más profundas pasiones
Hoy podría escribir, las más bellas canciones
Podría incluso decir, que mi corazón no entiende razones…

Pero incluso hoy, a mitad de la noche
Entre tantas pasiones, sentimientos y emociones
Algo en mí, teme ser lastimado sin querer…

Y es que me temo que estoy enamorada
Tengo en el pecho una sensación extraña
Traigo en el pensamiento a una persona atrapada
Creo que esta vez me siento un poco asustada…

A mitad de la noche…
En donde el silencio grita y las voces callan
En donde yo escribo mientras el mundo descansa
En donde se observa el cielo cubierto en tinieblas
En donde puedo expresar mis más profundas ideas…

Es aquí precisamente, A mitad de la noche…
En donde tu recuerdo se apodera de mi mente, una y mil veces
Invadiendo mi pensamiento lentamente

A mitad de la noche…
Puedo observar tu rostro grabado sobre la luna
Aquellos grandes ojos negros que me provocan ternura
Y Dibujada sobre las estrellas esta tu sonrisa
La misma que día con día ilumino mi vida
Llenándola de paz y mucha alegría

Verónica Gil Bravo

“A TI, MI DULCE FANTASÍA”

Mi mente ha estado preguntando mucho por ti…
Mi imaginación trata de hacer un esfuerzo desenfrenado y frenético por responder a la cuestión en conflicto, sin brindar un panorama preciso que satisfaga la curiosidad que haz sembrado en mi intelecto…

Haz despertado la ilusión dormida que mantenía inactiva mi fantasía… Y hoy por fin, empieza su larga y confusa travesía por el sendero tan diverso, misterioso, divertido y desafiante terreno que conduce hacia el camino de la imaginación y del destello…

Haciendo que todo parezca un sueño, alejándome de la realidad y encerrándome con la fantasía… Bendita fantasía que mi cabeza ha construido a través de la tecnología…

Todo el día espero la noche para poder verte mientras me encuentro dormida… es por eso que ésta noche, he dedicado un momento para escribirte a ti, mi dulce fantasía, mi extraña y completa desconocida…

A ti, que en este momento no tienes ni cara, ni cuerpo…
A ti mi dulce desconocida, que en mi mente no tienes un recuerdo fresco…
A ti bella durmiente, que nublas mi mente…

A ti, mi imagen distorsionada, que me das una esperanza y me brindas una pista para poder indicarme como mis ojos deberán mirarte…
A ti mi bella fantasía, te espero dormida en mis sueños, entre recuerdos borrosos y momentos hermosos…

A ti, que te cito a la mitad de la noche y te invito a la intimidad de mi cuarto, entre mis almohadas y las cuatro paredes que rodean mi cama, esperando tu llegada durante la madrugada, disfrutando la compañía de tu estancia en mi fantasía.


Verónica Gil Bravo

PINOCHO
(La Historia De La Mentira)


Pinocho…? ¿Quién es pinocho? Un típico personaje extraído de un cuento de hadas, en donde la mentira y la falacia se vuelven una esperanza…
Muchas veces la realidad supera las pantallas, convirtiendo el escenario en un campo de interminables luchas y grandes batallas…

¿Quien no conoce a un Pinocho..? ¿Quien no ha convivido con una marioneta…? Un muñeco de madera que hace que la fantasía parezca verdadera..!

Pues sí, esta es la historia de aquel pintoresco muñequito, tan real y tan maldito… Pinocho, aquel niñito que se notaba tan ingenuo y resulto ser en la mentira un genio...! Un maestro en el arte del engaño…! Un alumno en materia de lo cierto…!

Pero… ¿Qué motiva a aquel pedazo de madera a inventar semejante enredadera…? ¿Qué inspira a esa marioneta a vivir de esa manera…? La respuesta es tan simple y a la vez tan compleja que se torna como una realidad tan perpleja…

Quien conoce a un Pinocho sabrá, que esta historia no es puro choro… Es el relato de una historia sin fondo… Es el reflejo de la realidad que existe en la humanidad… Es el constante vivir del día a día…

Todos hemos convividos con aquel niñito… Incluso me atrevo a decir, que también hemos adoptado ese arte de vivir…Será el miedo el que nos invita a imitarlo…? O simplemente Pepe Grillo no estaba presente en aquel momento desesperado en el que pensábamos conseguir algo…?

Es verdad que es distinto ser el muñequito que convivir con uno de esos chiquitos… Es difícil decidir quien quieres ser… Si una marioneta o tan solo un Pepe Grillo… Tan correcto y diminuto… Tan tenaz y tan profundo…!

¿Quien es mejor…?
¿Cuál papel será el correcto…?
¿Qué protagonista quieres ser…?
¿Quién de ellos temes ser…?
Una pregunta difícil de responder…


Verónica Gil Bravo

“QUIERO…”

Quiero liberar mi alma del dolor
Quiero abandonar mi alma al amor
Quiero entregar mi ser a un ser superior

Quiero perder los estribos
Y amar hasta el final de camino
Sin pensar siquiera en el principio

Quiero sacar mis instintos
Hasta llegar a un lugar colorido
Donde todo sea distinto

Quiero romper la línea de la cordura
Hasta llegar al punto de la locura
Para ahuyentar de mí la amargura

Quiero quitarme la armadura
Hasta quedar completamente desnuda
Para cortar de tajo mis ligaduras

Quiero recuperar mi vida y ser independiente
Necesito encontrar mi identidad nuevamente
Aún no he podido romper ese patrón de volver a caer

Sigo cayendo sin poder aprender
Sigo tropezando sin siquiera caer
Sigo buscando y aun no se que

Sigo en crisis sin poder crecer
Sigo cayendo al pozo cada vez más hondo
Sigo extrañando a la persona que me ha dañado

Quiero arrancarte de mí
Quiero poder ser feliz
Quiero volver a reír

Quiero sentir que puedo
Quiero volver a sentir
Quiero no depender más de ti

Verónica Gil Bravo